Una duda en ortografía muy frecuente es si se debe escribir 'en torno' o 'entorno'.
Se trata de dos expresiones que suenan igual, pero cuya grafía es diferente.
La metáfora es cuando se establece una relación de semejanza entre 2 términos y alguna característica o cualidad que existe entre ambas, es como cuando hablamos en doble sentido. En la metáfora hacemos referencia poética a esa característica que queremos resaltar y decimos lo mismo pero de forma más bella. Aunque no nos demos cuenta, la metáfora se encuentra por todas partes.
El uso de la "d" y de la "z" se debe explicar, por cuestiones de dicción, conjuntamente al uso de la "t". Uso de d, t y z. Hay cierta confusión entre estas letras a final de palabra o de sílaba debido a que la d final tiende a pronunciarse en la zona centro de España como z y en la zona de influencia catalana, y otras, como t. Reglas:
La principal dificultad en el uso de i e y radica en el hecho de que la vocal i puede representarse por las letras i (i latina) o y (i griega). Como la primera es la empleada normalmente, nos detendremos a especificar únicamente aquellos casos en que pudieran confundirse. La y, en cambio, sólo representa el sonido vocálico de la i si va sola (conjunción y), delante de consonante (Ybarra) o en final de palabra (rey).
La letra r puede representar dos sonidos, el vibrante suave o simple y el vibrante fuerte o múltiple. Este último es muy difícil de pronunciar por los hablantes de origen extranjero. Además es fuente de dificultades fonéticas individuales. La posición que estos sonidos ocupen en la sílaba (inicial, intermedia, final) incide en la pronunciación y es importante para determinar su grafía.
Este es otro caballo de batalla en ortografía a la hora de redactar un texto, incluso más que la B y la V, en parte porque se hace un mal uso tanto en medios de comunicación como en publicidad. Aún recuerdo un anuncio en plena calle, mientras tomaba un café, que hacía referencia a una academia de lengua y su texto era el siguiente: "SE DAN CLASES DE LENGUAGE".
En las últimas décadas, el buen uso del castellano en las aulas ha sufrido un claro retroceso. La generación «EGB» no tenía la permisividad que hay hoy en día, donde las faltas de ortografía se pasan por alto en mayor medida. En los años 70 y 80 del pasado siglo, no te corregían el examen si excedía de un número -no precisamente alto- de faltas de ortografía.
El acento enfático es un mecanismo que la lengua española utiliza para diferenciar palabras que se escriben exactamente igual pero tienen diferentes significados.
Utilizamos Cookies para mejorar la navegación por nuestro sitio.