Crotales Electrónicos para el Ganado: Qué son y para qué sirven
Los crotales electrónicos, también conocidas como etiquetas de identificación electrónica (EID) o etiquetas de RFID (Identificación por Radiofrecuencia), son pequeños dispositivos utilizados para identificar y rastrear animales.
Sumario:
Estas etiquetas constan de un microchip y una antena encerrados en una carcasa de plástico o goma. Por lo general, se colocan en las orejas del ganado, como el ganado vacuno, las ovejas y los cerdos, pero también se pueden utilizar para otros animales como mascotas o vida silvestre.
Los crotales electrónicos se utilizan para diversos fines, que incluyen:
Identificación animal
Cada etiqueta tiene un número de identificación único asociado a un animal individual. Esto permite una identificación fácil y precisa, especialmente en grandes rebaños o piaras.
Las crotales electrónicos identifican a los animales mediante el uso de un número de identificación único asociado a cada etiqueta. Este número de identificación se almacena en el microchip de la etiqueta y puede ser leído por un lector de RFID (Identificación por Radiofrecuencia).
Cuando se acerca un lector de RFID al animal que lleva la etiqueta, el lector emite una señal de radiofrecuencia que activa la etiqueta. La etiqueta responde emitiendo una señal que contiene su número de identificación. El lector captura esta señal y lee el número de identificación de la etiqueta.
El número de identificación se puede utilizar para asociar información específica del animal en una base de datos, como datos de salud, origen, fecha de nacimiento, peso, historial médico, entre otros. Además, los lectores de RFID pueden tener capacidades adicionales, como la capacidad de almacenar y registrar la información leída de las etiquetas o transmitirla a sistemas de gestión y monitoreo.
Trazabilidad
La trazabilidad con las crotales electrónicos permite obtener información detallada sobre el origen, el movimiento y el historial de salud de los animales. Esto es especialmente importante en la industria ganadera por varias razones:
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Seguridad alimentaria: La trazabilidad garantiza que los productos de origen animal sean rastreables desde el campo hasta el consumidor final. En caso de detectarse un problema de seguridad alimentaria, como un brote de enfermedad o contaminación, es posible identificar rápidamente el origen del problema y tomar medidas adecuadas para proteger la salud pública.
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Control de enfermedades: La trazabilidad facilita el control y la prevención de enfermedades en el ganado. En caso de que se identifique un animal enfermo, es posible rastrear su historial y determinar su origen, así como identificar a otros animales que hayan estado en contacto con él. Esto ayuda a tomar medidas para evitar la propagación de enfermedades y proteger la salud del resto del ganado.
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Gestión eficiente: La trazabilidad con etiquetas electrónicas permite una gestión más eficiente del ganado. Los agricultores y ganaderos pueden realizar un seguimiento preciso de la ubicación y los movimientos de cada animal, lo que facilita la planificación de la cría, la alimentación, la reproducción y la logística. Además, se pueden analizar los datos recopilados para mejorar los procesos y la eficiencia en la producción ganadera.
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Cumplimiento normativo: En muchos países, existen regulaciones y requisitos legales relacionados con la trazabilidad del ganado. Las etiquetas electrónicas proporcionan una forma confiable de cumplir con estas regulaciones y garantizar que se cumplan los estándares y requisitos establecidos por las autoridades competentes.
Recopilación de datos
Las etiquetas electrónicas del ganado recopilan datos mediante el uso de un microchip incorporado en la etiqueta. El microchip almacena información específica sobre el animal, como su número de identificación, fecha de nacimiento, peso, historial médico y cualquier otro dato relevante.
La recopilación de datos puede ocurrir de diferentes maneras:
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Lectura manual: Los datos almacenados en las etiquetas electrónicas del ganado se pueden recopilar manualmente mediante el uso de un lector de RFID portátil. Un operador acerca el lector al animal y escanea la etiqueta. El lector captura la información almacenada en el microchip de la etiqueta y la muestra en la pantalla o la transfiere a una base de datos.
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Lectura automática: En algunos sistemas de gestión del ganado, se utilizan lectores de RFID fijos o estaciones de lectura ubicadas en puntos estratégicos, como puertas de acceso o áreas de alimentación. Cuando un animal con una etiqueta electrónica pasa por estos lectores, se realiza automáticamente la lectura de la etiqueta y se recopilan los datos correspondientes. Esto permite una recopilación de datos continua y en tiempo real sin intervención manual.
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Sensores adicionales: Además de la identificación, las etiquetas electrónicas del ganado también pueden tener sensores adicionales integrados para recopilar datos específicos, como la temperatura corporal del animal, su actividad física o la ingesta de alimentos. Estos sensores proporcionan información adicional sobre el bienestar y la salud del animal.
Es importante tener en cuenta que los datos recopilados por las etiquetas electrónicas se pueden almacenar en la propia etiqueta, en un dispositivo de lectura o en una base de datos centralizada. Dependiendo del sistema utilizado, los datos pueden ser accedidos y utilizados posteriormente para monitoreo, análisis, seguimiento de la salud, toma de decisiones en la gestión del ganado, entre otros fines.
Gestión y monitoreo
Los crotales electrónicos facilitan una gestión eficiente del ganado. Permiten a los agricultores y ganaderos monitorear el comportamiento de los animales individuales, rastrear los patrones de alimentación, registrar datos reproductivos e identificar animales enfermos o heridos.
Investigación y estudios
Los crotales electrónicos son herramientas valiosas en la investigación científica y los estudios de vida silvestre. Permiten a los investigadores recopilar datos sobre el comportamiento animal, los patrones de migración y la dinámica de las poblaciones.
Las etiquetas se leen típicamente mediante lectores de RFID portátiles o fijos, que emiten una señal de radiofrecuencia para activar y comunicarse con la etiqueta. El lector captura el número de identificación y otros datos relevantes de la etiqueta, que pueden almacenarse en una base de datos o utilizarse para un análisis inmediato.
Cabe destacar que las regulaciones relacionadas con el uso de crotales electrónicos pueden variar entre países y regiones. Además, existen diferentes tipos de crotales electrónicos disponibles, incluyendo etiquetas pasivas que dependen de un lector externo para la alimentación y etiquetas activas que tienen su propia fuente de alimentación para transmitir señales.
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