Tarta Sacher | Sachertorte | Recetas de Postres
Tarta Sacher | Sachertorte | Recetas de Postres

Tarta Sacher | Sachertorte | Recetas de Postres

Hoy os traigo la receta de una tarta muy conocida, la Tarta Sacher. Se trata de una tarta de chocolate típica de Austria: dos bizcochos de chocolate y, entre ellos, una capa de mermelada de albaricoque, todo ello recubierto de un glaseado de chocolate. Suena bien, ¿verdad?

Un poco más de culturilla: su creador fue Franz Sacher, un por entonces aprendiz de repostería que inventó esta tarta y, años después, fundó el hotel Sacher, donde se puede saborear un trozo de la original Sachertorte.

Mientras ahorramos para poder viajar a Viena y merendar en el Hotel Sacher, intentamos reproducir esta tarta de la mejor manera posible en casa!! Jaja

Está riquísima y es una tarta perfecta para alguna celebración, así que si tenéis cerca algo que celebrar… ¡os recomiendo esta receta!

Ingredientes para un molde redondo de unos 23 a 27 cm de diámetro (receta de De Uvas a Peras)

Para el bizcocho:

  • 6 huevos, separadas las claras y las yemas
  • 130g de chocolate negro
  • 130g de mantequilla
  • 200g de azúcar blanco
  • 14g de levadura en polvo (un sobrecito)
  • 130g de harina
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • Una pizca de sal

Para el relleno y el almíbar:

  • Mermelada de albaricoque (yo para el relleno usé un bote entero de 350g)
  • Tres cucharadas soperas más de mermelada de albaricoque
  • Tres cucharadas soperas de agua

Para la cobertura:

  • 250g de azúcar
  • 120ml de agua
  • 300g de chocolate
  • 80g de mantequilla

Lo primero es lo primero. Precalentamos el horno a 180º con calor arriba y abajo y engrasamos el molde que vayamos a usar.

Bizcocho:

Ponemos a derretir el chocolate al baño maría (importante, si no se nos podría quemar). Esto es, poner en un cazo agua a calentar, y encima del agua un bol de cristal que será donde pongamos el chocolate, que se derretirá por el efecto del calor del agua calentándose.

Cuando esté derretido el chocolate, apartamos del fuego y echamos la mantequilla hasta que se derrita por el calor del chocolate. Dejamos templar la mezcla y después añadimos las yemas, moviendo muy rápido con las varillas para que no se cuajen. Echamos el extracto de vainilla y removemos. Ahora reservamos esta mezcla para luego.

Ahora, con nuestra batidora de varillas o nuestro robot de cocina, echamos las claras y el azúcar blanco, y empezamos a montar las claras hasta que lleguen a punto de nieve.

Cuando ya estén, echamos la mezcla de chocolate poco a poco a las claras montadas, despacito y con movimientos envolventes con una espátula, sin darle mucho trote a la mezcla.

Cuando ya esté mezclado totalmente, incorporamos la harina, levadura y sal tamizadas previamente, poco a poco también, en dos o tres veces más o menos, y mezclamos muy bien.

Echamos la masa en el molde que vayamos a usar y metemos al horno unos 40 o 45 min, cuando pinchemos con un palillo y éste salga limpio, es que ya estará. Empezad a mirar y pinchar el bizcocho a partir de los 35-40 min, porque dependiendo del horno se hará antes o después.

Una vez lo saquemos, lo dejamos enfriar y después lo cortamos por la mitad. Lo rellenamos con la mermelada de albaricoque (unos 350g o 400g). Ponemos la otra capa de bizcocho por encima y la empapamos con el almíbar que vamos a preparar.

Almíbar:

Ponemos tres cucharadas soperas de mermelada de albaricoque en el vaso de la batidora junto con tres cucharadas soperas de agua y lo batimos bien. Metemos esa mezcla un minuto al microondas y después echamos ese almíbar por encima de la capa de bizcocho.

Cobertura:

Por último, vamos a preparar la cobertura. En un cazo echamos el agua con el azúcar, y ponemos a calentar a fuego medio hasta que se disuelva por completo el azúcar. Después, echamos el chocolate y vamos dejando que se derrita al calor del fuego y, cuando el chocolate ya se haya derretido, sacamos del fuego y ponemos la mantequilla para que se deshaga con el calor residual. Una vez todo ello es homogéneo, echamos la cobertura por encima del bizcocho que ya hemos preparado previamente.

Para no manchar mucho, podemos poner el bizcocho encima de un “pedestal” y este pedestal, a su vez, dentro de una fuente/cacharro/molde, así cuando echemos la cobertura de chocolate por encima de la tarta, como irá cayendo (por el efecto de la gravedad y eso), caerá dentro de la fuente y no en la encimera, o el suelo… o vete tú a saber.

Bueno, pues después de haber puesto por encima la cobertura, traspasamos con mucho cuidado a un plato y ya está! Yo la decoré con fresas porque me encantan y justo había en casa, pero podéis decorarla como queráis y como más os guste!

Siento que la explicación sea tan larga, pero ya sabéis que me gusta explicar bien las cosas! Y si aun así no las he explicado bien… Pues preguntadme lo que sea!!

¡Hasta la próxima y muchas gracias por leerme!

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