¿Qué es la Navegación de Incógnito y para qué Sirve?
Parece que tu navegador web sabe más de ti que tus amigos. No deja de ser extraño que puedas estar buscando viajes a París y luego aparezcan anuncios de paquetes de vacaciones en Francia en páginas web aleatorias o en tu feed de Facebook.
Sumario:
¿Es hora de usar la función de incógnito o privacidad en tu navegador? Tal vez sí, tal vez no. Los modos de privacidad tienen limitaciones que debes entender.
Desde que se creó la navegación privada, los usuarios han estado confundidos acerca de la diferencia entre proteger su actividad online de otros usuarios de un dispositivo compartido, de sitios web y redes publicitarias, o de sus proveedores de servicios de Internet.
La navegación privada se desempeña bien con el primero de estos casos, a veces aborda parcialmente el segundo y no tiene absolutamente ningún efecto en el tercero. Los desarrolladores de navegadores han intentado dejar esto claro.
Cómo activar el modo incógnito
Digamos que quieres usar la función de incógnito en el navegador Chrome o la aplicación Chrome (el nombre de esta función varía dependiendo de si estás usando Chrome, Firefox, Safari u otro navegador). Esto es lo que debes hacer:
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A la derecha de la barra de direcciones de Chrome, haz clic en los tres botones dispuestos verticalmente (esto mostrará más opciones).
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Busca la opción de Nueva pestaña de incógnito. Haz clic en eso y se abrirá una nueva ventana.
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Alternativamente, presionar Control+Shift+N te llevará al modo incógnito en un solo paso.
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Puedes identificar que estás en modo incógnito por el icono de Incógnito en el centro de la pantalla y en la esquina superior derecha.
Además del icono de Incógnito, también verás estas advertencias sobre la navegación privada en la pantalla de inicio:
Estás en modo incógnito. Ahora puedes navegar de forma privada, y las demás personas que usen este dispositivo no verán tu actividad. Sin embargo, las descargas y marcadores se guardarán. Google Chrome no guardará lo siguiente:
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Tu historial de navegación
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Cookies y datos de sitios web
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Información ingresada en formularios
Tu actividad aún podría ser visible para:
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Los sitios web que visitas
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Tu jefe o centro educativo (en caso de estar navegando desde alguno de estos sitios)
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Tu proveedor de servicios de Internet
Esto es lo que significa: Los navegadores normalmente guardan las direcciones web (llamadas URLs) de los sitios que visitas. Esto facilita encontrarlos más tarde.
En modo privado (incógnito), tu navegador funciona de manera un poco diferente. Tu historial de búsqueda no se guardará localmente.
Esto es genial para ocultar tu historial de navegación de cualquier otra persona que use el mismo dispositivo, como cuando estás buscando un regalo sorpresa o si estás en sitios web orientados a adultos. Pero eso no significa que tus actividades sean completamente privadas.
Tu navegador también guarda cookies, que son pequeños archivos de datos con una gran cantidad de usos. Por ejemplo, las cookies pueden ingresar automáticamente contraseñas, para que no tengas que escribirlas cada vez que visitas un sitio.
O pueden proporcionar información de seguimiento para empresas publicitarias que realmente quieren entender cómo navegas de un sitio a otro, para ayudar a alguien, en algún lugar, a venderte productos.
El diseño original de características de seguimiento web como las cookies se basaba en la expectativa de que el seguimiento sería solo dentro de sitios individuales y no conectaría sesiones de navegación separadas a menos que el usuario lo deseara.
Ambas de estas normas han sido violadas masivamente por la industria de publicidad en internet, que a menudo crea perfiles detallados y completos de lo que las personas hacen online a lo largo del tiempo.
En algunos casos, el modo de navegación privada puede desconectar temporalmente la navegación de alguien de los medios técnicos utilizados para mantener la mayor parte de esos perfiles.
En otras palabras, en el modo privado, las cookies no proporcionarán a los anunciantes la información detallada que de otra manera obtendrían de tus actividades.
El modo privado no es lo mismo que el modo anónimo
Pero es crucial entender que usar el modo incógnito no te hace anónimo. No es una especie de superpoder de invisibilidad online.
No detendrá a tu proveedor de servicios de Internet (ISP) o empleador de rastrear tus actividades en la web. No ocultará tu ubicación de los sitios que frecuentas.
Si estás conectado a tu cuenta de Google, Google aún está rastreando tus patrones de búsqueda, incluso si eliges el modo incógnito.
Si te sorprende esto, no estás solo: un estudio de 2018 mostró que las confusiones sobre la navegación privada son frecuentes (El cincuenta y seis por ciento de los encuestados pensaban que las consultas de búsqueda no se guardarían en modo privado, a pesar de que también estaban conectados a sus cuentas de Google, y el cuarenta por ciento pensaba que sus geolocalizaciones estarían ocultas.
Un adicional del veintisiete por ciento pensaba que el modo privado ofrecía protección contra malware y virus. Ninguna de estas afirmaciones es cierta).
A pesar de no ser anónimo, la navegación privada aún tiene varios usos buenos. Además de evitar que otros usuarios locales vean tu historial de búsqueda, a veces es útil para evitar barreras que te impiden leer contenido en sitios de noticias exclusivos para suscriptores.
Y la navegación privada puede reducir las posibilidades de que tus búsquedas en la web estén sesgadas por los algoritmos que rastrean tu uso para anticipar la información que buscas.
También detendrá ese molesto seguimiento de sitios web y redes publicitarias, como en el ejemplo de París que dimos al principio.
Y digamos que un amigo quiere usar tu computadora rápidamente para verificar su página de Facebook; podría hacerlo en modo incógnito e iniciar sesión en su propia cuenta de Facebook sin tener que cerrar sesión en la tuya primero.
Mejora el anonimato online
Si realmente necesitas anonimato online, tendrás que hacer más que usar el modo privado. Las opciones más accesibles son las redes privadas virtuales (VPN) y Tor, que enrutan tus comunicaciones a través de intermediarios de manera que disminuyen lo que tu ISP sabe sobre lo que haces online y también disminuyen lo que los sitios web que visitas saben sobre desde dónde te conectas.
Sin embargo, ninguna de estas opciones son remedios mágicos que te hacen totalmente anónimo. Ayudan muchísimo, pero aún estaríamos expuestos.
Ambas soluciones también sufren de muchos mitos y conceptos erróneos. Aunque los detalles técnicos sobre quién puede ver qué son diferentes de la situación del modo de navegación privada, esos detalles aún existen y los usuarios deben familiarizarse con ellos antes de confiar en estas tecnologías de privacidad para el anonimato.
Con un poco de investigación, sin embargo, puedes comenzar el camino hacia una mejor privacidad online. Al hacerlo, podrás proteger mejor tu vida personal y profesional y tener más tranquilidad en una red llena de potenciales peligros.
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